Microsoft unifica su división de Windows en un solo grupo

Microsoft ha dado un paso importante al realizar una reorganización histórica en la división de Windows. Por primera vez desde 2018, todos los grupos de ingeniería responsables del sistema operativo se han reunido en un único equipo. El propósito de esta medida es evidente: acelerar el desarrollo de Windows y ofrecer una evolución más coherente y ágil.

Microsoft unifica sus equipos de desarrollo de Windows

Para quienes no lo recuerden, durante muchos años Microsoft mantuvo unificados todos los equipos de desarrollo de Windows. Sin embargo, tras la salida de Terry Myerson en 2017 y el fin de Windows 10 Mobile ese mismo año, se produjo un hecho inusual: en 2018, la división de Windows se fragmentó en varios grupos de trabajo independientes. Esta separación provocó un estancamiento en el desarrollo del sistema operativo, con menos innovaciones relevantes y un incremento de los errores en comparación con el periodo anterior a la fragmentación.

Cuando Panos Panay asumió en 2020 la dirección conjunta de Windows y Surface, se intentó una reorganización de la división para recuperar la estructura unificada de años pasados. Aunque se logró integrar áreas clave —como los equipos encargados del shell y de las aplicaciones—, la división nunca logró el mismo nivel de cohesión que había tenido antes.

Luego de la salida de Panos Panay y el paso discreto de otros ejecutivos por la división, Microsoft ha decidido unificar de nuevo todos los equipos de desarrollo de Windows, dejándola en un estado muy similar al de 2017. Sin embargo, esto no implica un regreso total al modelo anterior, ya que las áreas más críticas del sistema seguirán bajo el control de la división de Azure. Aun así, esta reorganización promete impulsar el desarrollo de Windows, favoreciendo una mayor coherencia y velocidad en la introducción de nuevas características.

La meta de Microsoft: transformar Windows en un "SO ágentico"

En la competencia entre las grandes tecnológicas por liderar la inteligencia artificial, Microsoft se inclina hacia el concepto de un sistema operativo ágentico. Esto implica que el mismo sistema, potenciado por IA, será capaz de llevar a cabo diversas tareas y interactuar de manera autónoma con archivos, aplicaciones y ventanas. De esta manera, un usuario podría solicitar la búsqueda de un documento y, a partir de ahí, pedir nuevas acciones que el sistema operativo ejecutará automáticamente, sin intervención manual.

Este es el enfoque que Microsoft aspira a implementar inicialmente en Windows, al tiempo que sigue integrando funciones de inteligencia artificial más sofisticadas en la plataforma. La reciente reestructuración interna facilitará una aceleración en el desarrollo de estas características y permitirá una respuesta más rápida frente a la competencia, que ya se encuentra trabajando en sus propias opciones para competir con el rol fundamental de Windows en el mercado.