Aterrizando por primera vez en el Aeropuerto Internacional John F. Kennedy, llegar al centro de Nueva York y adentrarse en su jungla urbana única puede ser una experiencia extremadamente hostil para el visitante por primera vez.
El tráfico es peligroso y tan caótico como el transporte público, caminar a un ritmo relajado es nada menos que una actividad arriesgada en la que te arriesgas a ser regañado por uno de los millones de peatones que se apresuran con demasiados problemas en la cabeza para obstruir su paso, los precios son desorbitados, los amigos de los demás están a la orden del día ...
Ante tal escenario, donde muchos experimentan un rechazo visceral y casi instantáneo, otros sienten como la ciudad nos abraza con una extraña calidez y nos integra en su lógica anárquicaCómo nos hace sentir "uno más" mientras nos asombra con sus infinitos encantos -que van mucho más allá de rascacielos, puentes y juegos de luces- y nos hace sonreír con complicidad ante sus defectos demasiado múltiples y desproporcionados.
Solo dos amantes profundos y conocedores de la ciudad que nunca duerme como Martin Scorsese y Fran Lebowitz podrían comprender esta dicotomía como lo hicieron en The Marvelous. "Supongamos que Nueva York es una ciudad"; una miniserie documental de siete partes más brillante y divertida, que reúne al dúo tras el gran "Public Speaking" de HBO para trastornar la capital mundial.
Nueva York bajo la lupa de dos genios
Es extraordinario ver cómo la verborrea aguda y altamente inteligente de Fran Lebowitz `` Supongamos que Nueva York es una ciudad '' transforma lo que podría ser, uniendo las distancias obvias del formato, el levantarse más lúcido y redondo de lo que caminaba Netflix una radiografía de Nueva York excepcional tanto en su deseo de difusión como en su capacidad para entretener.
Completando el desbordante genio del escritor, Scorsese actúa como maestro de ceremonias, imbuyendo las imágenes con su inimitable prestigio personal.. Esto incluye una edición rítmica y precisa que combina el archivo con material actual fotografiado por una Ellen Kuras particularmente inspirada, una selección musical en la que perderse durante horas y una gestión espectacular de la película. de que se empareja con sus obras de ficción.
Combinando tus inconmensurables talentos, Marty y Fran abrazan lo trivial y lo trascendental; desde la cultura neoyorquina de los años 70 y la gestión fiscal hasta la dificultad de encontrar un apartamento cuando tienes 10.000 libros en tu biblioteca personal, hasta los horrores que esconde el metro y las anécdotas de Lebowitz con figuras de la talla de Charles Mingus que aportan un relato biográfico Complemento a la producción. Una enorme variedad temática que te ayuda a devorarla sin pestañear.
'Supongamos que Nueva York es una ciudad' es Primer gran estreno de Netflix en 2021. Un viaje fascinante por un lugar único en el mundo que, a diferencia de la metrópoli en la que se centra, no deja lugar al amor ni al odio; sólo hay lugar para la mayor obediencia.
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